jueves, 13 de diciembre de 2007

1 Año en UN Post

Amanece, que no es poco.

Un año de errores.

Un año en que te das cuenta de que estás sumido en una vida hecha para alguien que no eres tú. Regida por normas que no entiendes, y que prefieres no entender.

Un año en el que intentas por fin abrir los ojos, y que cuando los tienes casi abiertos, preferirias haberlos dejados cerrados de por vida.

Un año para darte cuenta, de que a la tierna edad de 23 años, ya has hecho y vivido muchisimo más que personas que te duplican la edad.

Año para darte cuenta de que todo es realmente fázil, de que no hay NADA imposible. Y cuando te das cuenta de ello, te aburre.

Un año en que hay veces en que inconscientemente te gustaría ser como la mayoría de personas que se dejan engañar por una sociedad que los manipula a su antojo. Por suerte es solo un pensamiento que rara vez te atormenta. Por lo general los sueles compadecer.

Un año para ver como los fantasmas del pasado no cesan de llamar a tu puerta, y tu, en lugar de cerrarsela en sus narices, no haces más que mirar por la mirilla, y si puedes, abrirla un poco, lo justo para que te vuelvan a joder. Es un bucle infinitivo. Tú, que te crees tan superior, es en esos momentos cuando te das cuenta de que eres uno más de esa mayoría que tanto compadeces.

Un año para darte cuenta por fin, de que la vida no es tan bonita como te la pintaban tus padres. Has vivido toda tu vida inmerso en una burbuja, protegido por aquellos que te dieron la vida y la educación. Siempre has tenido lo que has querido y cuando has querido. Pero llega un momento en que dices ¡basta! e intentas huir. Quieres conseguir cosas por ti mismo... y las consigues.

Un año para darte cuenta de que aún quedan mil y una cosas que te puedan sorprender, y te gusta.

Un año para sin más, hacer valer la frase de mi gran amigo Groucho.

"¿Que si lo entiendo? Claro que lo entiendo! Hasta un niño de 5 años lo entendería. ¡Que me traigan un niño de 5 años!.

SickBoy-----

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho tu relato y ahí tienes mi voto

un saludo y mucha suerte :)

El Divan Digital dijo...

Bién, todos nos damos cuenta, ya sea a los 20, a los 23 o a los 30, que la vida no es tan bonita como nos la pintaban ... de hecho, ese es el encanto de ser un niño. De todos modos, la vida a los 23 te muestra dificultades como tu dices, peró también te abre puertas a todo un camino, que hasta ahora, a sido desconocido. COmentas que ya has podido caer en el aburrimiento, te recomiendo que le des una nueva oportunidad al 2008 para descubrir que, quizás, hay cosas mucho más interesantes de lo que esperas.

Felicidades por tu relato.

Un saludo